Antes de hablar de un libro político vale distinguir entre el libro político periodístico y el científico-crítico. El primero, en su versión sensacional, es el más popular y todavía goza del apogeo que le dio el caldeamiento de la política en los medios de comunicación masiva y su fuerte influencia en la opinión pública; el segundo es recibido con mucho menos entusiasmo, salvo dentro de las fronteras académicas o esferas intelectuales, pero sin perder relevancia como motor del pensamiento social.
Es comprensible: mientras las publicaciones periodísticas sensacionalistas transmiten las confortables perspectivas maniqueas sobre la política y se apoyan en las emociones y sentimientos de indignación cívica o moral, los libros políticos científicos o críticos requieren una lectura laboriosa, con resultados mucho menos capitalizables en las querellas de sobremesa, las redes sociales o las confrontaciones de pasillo. La distinción parece innecesaria, pero no lo es.
Luchas por la hegemonía es el corolario del trabajo interdisciplinar –predominantemente etnográfico e histórico– entre científicos sociales que supieron conjugar intereses y objetivos diversos respecto a la hegemonía política en la provincia de Misiones. Esta compilación de textos sostiene la rigurosidad analítica del trabajo científico y la prosa académica, pero no resulta hermética para la lectura extraescolar. Aunque la editorial haya decidido denominar “capítulos” a las entradas reunidas bajo este título, la lectora no debe dejarse confundir ni el lector desanimar: como toda compilación, permite una lectura fragmentada o selectiva.